Episodio 9: Filosofía: cinco minutos en dial 10
de la vida.
00:00:18 - Dios puede hacer todo lo que al ser hecho no incluye contradicción. Anticipándose y Guillermo de Occam, a comienzos del siglo XIV, sienta esta premisa en su tratado sobre los principios de la teología.
00:00:35 - Y aunque hoy se pone en duda que esta obra sea de su pluma, nadie puede negar que contiene resumidamente sus ideas principales.
00:00:45 - Entre ellas, el famoso principio conocido como la baja de Occam para cortar, es decir, eliminar todo lo que sea superfluo en una teoría.
a partir de estos dos principios deduce una impresionante serie de afirmaciones a modo de teoremas como por ejemplo que Dios puede producir cualquier efecto sin su causa que pudo crear un mundo eterno que siempre puede producir algo más perfecto que algo dado indefinidamente lo cual es una interesante anticipación de la ley del progreso pero ontológico que podría haber ordenado que que se lo amase, etcétera. Una sola de estas proposiciones pudo haber bastado para arreizar los cabellos de sus piadosos contemporáneos a quienes semejante imagen de la divinidad debió resultar horripilante. Occam no pareció muy preocupado por ese juicio, ni siquiera por las censuras a que lo sometió la orden franciscana a la que pertenecía y a cuyo pantión de celebridades académicas tardó muchos siglos en ingresar. Además de estas teorías teológicas malsonantes para los espíritus píos, dedujo otras cosas más interesantes para los filósofos que no se ocupan de la teología. Por ejemplo, que no hay pluralidad de conceptos, sino pluralidad de cosas, que no puede haber varios conceptos adecuados de algo simple, aunque haya varias palabras para denominarlo. Que la diversidad de ciencias depende de la diversidad de propiedades y no de sujetos a estudiar. Que las virtudes o capacidades intelectuales o morales pueden ejercitarse en cualquier grado con independencia de las demás, etcétera.00:02:32 - Los filósofos del siglo XX encontraron en este viejo frail inglés el antecesor de que constituyeron para nosotros el dernier cri de la moda filosófica, el análisis lingüístico, el atomismo lógico, la metafísica de la diferencia, para citar algunas. Y aunque cierto que esa aproximación existe, debiéramos acotar que las vías en ambos casos fueron distintas, más aún claramente divergentes. Okam no arribó a sus conclusiones a partir de su convencimiento de la indubitabilidad de sus dos principios, los contemporáneos parecen que llegado a similares pensamientos a partir de sus dudas sobre ellos. Pero también es innegable que tienen algo muy importante en común, haber planteado, como alternativa del ejercicio de la razón, la eliminación de ciertas restricciones tenidas por intocades. Decimos que todo efecto debe tener una causa. ¿Pero qué pasa si suponemos que no es así? Para nuestra sorpresa, el pensamiento no se detiene, imposibilitado de continuar, sino que llega a otros resultados diferentes y quizá más estimulantes. Haber eliminado el quinto postulado de Euclínes no arruinó la geometría, sino que le dio un impulso enorme y un crecimiento que no tuvo igual durante más de veinte siglos.
00:03:59 - Occam se propuso eliminar todas las restricciones posibles de la razón, tomando como modelo teórico la mente divina y halló que podía eliminar todas menos el principio de no contradicción.
00:04:11 - Después de muchos laberintos argumentativos, parece que el siglo XX concuerda con él en el sentido de que al pensar general requiere una especie de principio de no contradicción, al menos en cuanto al modo de formular las expresiones y que hoy, que está de modo el pensamiento débil, suele denominarse principio de coherencia. ¿Y el aspecto live de nuestra cultura de masa tendrá relación con esto? ¿Y es el principio de coherencia una reformulación live del principio camista? Si fuera así, podríamos consolar a los actuales disconformes, recordándoles que en la historia de la filosofía suele cumplirse la física que explica porque lo más leve se ubica en los lugares más altos. Aunque, pensando lo bien, quizá esto no los consuele.