Episodio 1: Filosofía: cinco minutos en dial 2
00:00:00 - La responsabilidad es el alma que elige su destino, no hay culpa alguna en la divinidad.
00:00:20 - Así cierra su discurso a la Virgen Laquesis, hija de la necesidad, cuando exhorta las almas escoger sus cuerpos y su género de vida en el mito platónico de la reencarnación al filar de su célebre diálogo La República. Según la narración, se sacaron suerte para ver el orden en que cada uno elegiría sus posibilidades. Naturalmente los últimos parecerían menos favorecidos porque restarían los peores vidas posibles. Pero Platón corrijes ahí tu justicia, haciendo decir a lo divino. Hasta para el último que venga, si elige con discreción y vive con cuidado, hay una vida amable y buena, que no se descuide quien elija primero ni se desanime quien elija último.
00:01:05 - Leído la luz de la tradición griega, este esfuerzo platónico por asegurar metafísicamente la moralidad y premiar la virtud nos parece un significativo avance. Los griegos tenían por su praumano y divino al destino, vinculado a la ley de necesidad universal. Sin embargo, también preguntaban que la libertad humana no sólo podía oponerse, como en los casos límite que muestran las tragedias, sino que incluso quizá podía hacerlo exitosamente.
00:01:35 - Y en todo caso, la ley, moral o jurídica y la eticidad solo tienen sentido si el hombre puede de algún modo elegir su destino, como decía Platón.
00:01:46 - La tradición judiocristiana, centrada en el criterio de la libertad o libre árbitro humano como condición de toda relación interhumana y con la divinidad, ha puesto otro elemento de tensión y de hace más de 20 siglos el dilema necesidad versus contingencia o determinismo versos libertad ha ocupado y preocupado los grandes filósofos.
00:02:10 - Sigue pareciéndome excelente la solución platónica, elegir el destino.
00:02:16 - ¿Qué significa esto? ¿Qué es el destino que se elige?
00:02:22 - Digamos, ante todo, que no es una elección consciente y voluntaria en cada uno de nuestros actos vitales, lo que sería imposible.
00:02:30 - Pero sí es consciente y voluntaria en cuanto a saber lo que se es, lo que se quiere y se desea hacer, es decir, lo que se proyecta.
00:02:37 - Platón viene a decirnos que, en un sentido profundo y absoluto, somos lo que proyectamos ser aunque pudimos equivocarnos.
00:02:45 - Esta relación entre el ser que somos y el que proyectamos es la responsabilidad.
00:02:51 - En un sentido más inmediato, llamamos responsabilidad a la atribución a un sujeto de una conducta con todas o algunas de sus consecuencias.
00:02:59 - En un sentido ontológico profundo, la responsabilidad es la aceptación del ser y sobre la construcción del proyecto de llegar a ser.
00:03:09 - Nuestra cultura ha seguido en estos dos días divergentes por exceso.
00:03:14 - En algunos casos cargan nuestras espaldas como Atlas inmensas responsabilidades en asuntos sobre los cuales tenemos pocas posibilidades de influir.
00:03:23 - Como contrapartida nos incita o nos permite desresponsabilizarlos permanentemente poniendo en otros la causa de nuestras desgracias. Cuando nos va bien, somos responsables. Cuando nos va mal, son los otros. Los padres, el conyo y los hijos que no nos comprende, el jefe, los compañeros que nos envidian, el Estado que nos abruma, las estrellas que no nos son propices.
00:03:46 - Ya Platón nos advirtió la inutilidad de estos descargos. En universo no tiene la culpa de nada. La responsabilidad solo puede ser nuestra, porque de lo contrario no sería responsabilidad. No será elado quien nos elija, sino que vosotros elegiréis vuestro aduo. Sentenciaba Platón por boca del áquisis. Desde entonces dudamos en transumir esa condición de lectores o refugiarnos en nuestra caverna protectora y beber el agua de olvido en forma de teorías filosóficas, doctrinas religiosas o siempre despreocupación. Aquel río cuyas aguas decía Platón, ninguna vacija puede contener. Pero si logramos recordar el origen, la elección del destino se nos ha prometido la felicidad. Y así como todos los hombres deseamos naturalmente saber, todos queremos ser felices. Elijamos nuestro destino.