Episodio 63: Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 7,1-10

00:00:00 - Proclamación del Santo Evangelio, según San Lucas, por la señal de la Santa Cruz de nuestros enemigos, Libranoseñor Dios Nuestro.

00:00:28 - En aquel tiempo, cuando terminó Jesús de hablar a la gente, entró en Caffarnaún.

00:00:35 - Un centurión tenía enfermo a punto de morir, a un criado a quien estimaba mucho.

00:00:43 - Al oír hablar de Jesús, le envió unos ancianos de los judíos para rogarle que fuera a curar a su criado.

ellos, presentándose a Jesús, le rogaban encarecidamente, merece que se lo concedas porque tiene afecto a nuestro pueblo y nos ha construido la sinagoga.

00:01:11 - Jesús se fue con ellos, no estaba lejos de la casa.

00:01:16 - Cuando el santurión le envió unos amigos a decirle,

00:01:22 - Señor, no te molestes, no soy quién para que entres bajo mi techo, por eso, tampoco me creí digno de venir personalmente.

00:01:34 - Dilo de palabra y mi criado quedará sano, porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes les digo a uno ve y va al otro ven y viene y a mi criado hace esto y lo hace al oír esto

00:01:59 - Jesús se admiró de él y volviéndose a la gente que lo seguía dijo os digo que ni en en Israel he encontrado tanta fe y al volver a casa los enviados encontraron al siervo sano.

00:02:21 - Palabra de Dios.

00:02:24 - Gloria a ti, Señor Jesús.

00:02:28 - Bien, hermanos jepecinos, pues el pasaje del Evangelio de hoy es uno de los más enternecedores por varios motivos. La fe del centurión, que además dice en sus emisarios judíos, es un hombre bueno, nos ha construido una sinaboga.

00:02:53 - La misericordia de Jesús, que se admiró de él.

la curación que proviene de Cristo.

00:03:04 - Los enviados encontraron al siervo sano.

00:03:10 - Es admirable todo lo que se nos narra.

00:03:16 - Pongámonos en situación.

00:03:19 - Un hombre ajeno al pueblo de Israel oye hablar de Jesús.

00:03:25 - Tiene un siervo enfermo y acude al maestro en busca de solución.

00:03:33 - Es un santurión, un representante del poder, pero su carácter humilde le impide presentarse en persona y envía a unos amigos.

00:03:48 - Su pureza de corazón hará que Cristo se conmueva y exclame.

os digo que ni en Israel he encontrado tanta fe. Porque la fe de ese hombre salta a la vista de todos. No importa que sea extranjero, que sea pagano, que venga de otras tierras. Lo único que importa es su actitud ante Cristo, del que ha oído hablar y en quien cree desde el fondo de su corazón.

cuánto tenemos que aprender desde Centurión, si fuéramos como él nuestra vida sería mucho más sencilla, más llena de amor, más plena, más en comunión con Jesús y la iglesia y en el fondo seríamos más felices, más llenos de vida y eso se notaría a nuestro alrededor, seríamos esa sal de la tierra capaz de transformar el mundo. Seguramente que ese día en el que la vida del Centurión se se cruzó con Cristo, muchos de los que fueron testigos creyeron y se convirtieron y no tanto por el prodigio de la curación como por la actitud de aquel hombre y la respuesta que obtuvo de Jesús. Por ello, seamos humildes en nuestro trato con Dios, confiemos plenamente en él. Dejemos de lado nuestras circunstancias, nuestros deseos mundanos, nuestros recelos y prejuicios.

00:05:47 - Como hemos podido notar, hoy contemplamos la bella escena de este oficial militar o centurión romano, quien por medio de emisarios pide a Jesús que cure a su esclavo.

que él amaba al pueblo judío y tenía fe en Jesús por lo que había oído acerca de él y de sus milagros. Tal es así que la fe y la conducta de este oficial anónimo eran tan profundos que sus palabras han entrado en el sitio de la comunión de la Santa Misa, de que Jesús vaya a su casa.

00:06:34 - Gracias.

00:06:59 - Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org