Episodio : El rey y sus cuatro esposas

00:00:00 - El cuento del rey y sus cuatro esposas. A lo largo de la vida vamos formando diferentes relaciones con las personas, aunque no todas ellas nos brindan las mismas atenciones y nos provocan los mismos sentimientos, es verdaderamente necesario abrir los ojos y el corazón para poder valorar a cada uno cómo y cuánto se merece, porque a veces podemos llevarnos sorpresas.

00:00:26 - Había una vez un rey que tenía cuatro esposas, él amaba su cuarta esposa más que las demás y la adornaba con ricas vestiduras y la complacía con las deliciosas mafinas, solo le daba lo mejor. También amaba mucho a su tercera esposa y siempre la exhibía en los reinos vecinos, sin embargo temía que algún día se fuera con otro. También amaba su segunda esposa, era su confidente y siempre se mostraba bondadosa y considerada paciente por sobre todo, cada vez que el rey tenía un problema confiaba en ella para ayudarle a salir de los tiempos difíciles. La primera esposa del rey era una compañera más leal y había hecho grandes contribuciones para mantener tanto la riqueza como el reino del monarca, sin embargo él no amaba su primera esposa, aunque ella lo amaba profundamente, él apenas se fijaba en ella.

00:01:33 - Un día, el rey enfermó y se dio cuenta de que le quedaba poco tiempo para pasar, pensó acerca de su vida de lujo y cabilo. Ahora tengo cuatro esposas conmigo pero cuando muera estaré solo. Así que le preguntó a la cuarta esposa, te he amado más que a los demás, te he dotado de las mejores vestimentas y te he cuidado con Esmero.

00:01:58 - Ahora que estoy muriendo, ¿estarías dispuesto a seguirme y ser mi compañía?

00:02:04 - Ni pensarlo, contestó la cuarta esposa y se alejó sin decir más palabras.

00:02:12 - Su respuesta penetró en su corazón como un cuchillo filoso.

00:02:16 - El estremecido monarca le preguntó a su tercera esposa, te he amado toda mi vida, ahora que estoy muriendo estarías dispuesto a seguirme y ser mi compañía? No, contestó su tercera esposa, la vida es demasiado buena, cuando muera pienso volverme a casar. Su corazón se estremeció, tan fuerte sacudió y se puso frío. Entonces preguntó a su segunda esposa,

00:02:48 - ¿Siempre he venido a verte a ti por ayuda y siempre he estado allí? Cuando muera estarías dispuesta a seguirme ser mi compañía? Lo siento, no puedo ayudarte en esta vez, contestó la segunda esposa, lo más que puedo hacer por ti es enterrarte.

00:03:07 - Su respuesta vino como un relámpago estridente para devastar al rey.

00:03:13 - Entonces escuché una voz, me iré contigo y te seguiré donde quiera que tú vayas.

00:03:20 - El rey dirigió una mirada en dirección a la voz y allí estaba su primera esposa.

00:03:25 - Se veía tan delgada, sufrida de desnutrición. Profundamente afectado el monarca dijo, debía haberte atendido mejor cuando tuve la oportunidad de hacerlo, en realidad todo tenemos cuatro esposas en nuestras vidas, nuestra cuarta esposa en nuestro cuerpo, no importa cuánto tiempo y esfuerzo invertamos en hacerlo, lucir bien nos dejará cuando muramos, nuestra tercera esposa son nuestras posesiones, condición social y riqueza. Cuando muramos estaremos todos, todos se irá para otros. Nuestra segunda esposa en nuestra familia y amigo, no importa cuando hayamos sido de apoyo a nuestros seres queridos, lo que nos podrán hacer es acompañarnos hasta el sepulcro. Y nuestra primera esposa en nuestra alma, frecuentemente ignorada en la búsqueda. Sin embargo, nuestra alma es la única que nos acompañará donde quiera que vayamos.

00:04:32 - Así, cultíbala, fortalecela y cuídala. El más grande regalo que podemos ofrecer al mundo, hazla brillar. El cuento, el rey y sus cuatro esposas.