Episodio : 156. Difamación y calumnia de mis contrarios.

00:00:00 - Ipamación y Calumnia de los Contrarios

00:00:18 - Ipamación y Calumnia de los Contrarios

00:00:22 - La difamación y calumnia fue la base de la campaña de mis contrarios, especialmente del parlamentario Francisco Sarama y su hijo Memo Sarama que era diputado a la Asamblea.

00:00:37 - Y en todas las veredas decían cuando yo me retire de la Casa Merlera impasto no renuncié, sino que me echaron por la dron,

00:00:47 - Que ellos irían a hablar con el gerente el miércoles de la próxima semana, para hablar y solicitarle una certificación y la vamos a publicar por la radio, el derecho, el diario del sur, etcétera para justificar lo que estamos diciendo.

00:01:06 - El domingo siguiente me llama de berrueco don Alberto Dorado y me informa que acaba de enterarse que Memo Sarama va a ir a Pasto para hablar con el gerente de la casa Medler, el miércoles, sobre su conducta cuando trabajó en esa empresa. Yo enterado de esto me preocupé y lo primero que pensé fue ir a hablar con Don Augusto Leonard y contarle la verdad el día lunes. Hablando con Don Augusto se sorprendió al verne. Hacía 16 años que había salido de la Média. Le hablé que estaba interesado en la primera alcaldía popular de mi municipio.

00:01:50 - Mi caballito de pelea es servir a la gente, organizándolos para que se puedan electrificar y disfruten de todos los servicios. Esto ha convencido a la gente y ha llenado de rabia a mis opositores que lo único que hacen es engañarlos y dicen en las veredas que que no me ayuden, que soy un ladrón, que cuando trabajé en la Casa Merlin no renuncié, sino que me echaron por ladrón.

00:02:22 - Don Augusto me dijo, Don Julio, así no hubiera venido al estarme.

00:02:28 - Yo sé quién es usted y todavía lo recibimos, el día que quiera, porque usted conoce todo esto ha sido un gran trabajador.

00:02:39 - Tranquilo, yo sé cómo manejo esto, le di las gracias y quedé a volver el jueves para saber cómo le había ido. Llegué el día jueves y cuando me entrevisté con Don Agusto, me dijo, razón que calumían a la gente.

00:02:57 - Vino un señor Memo Sarama y empezó a solicitarme todos los datos sobre su conducta cuando trabajo en esta empresa. Yo le ensinué cómo quiere usted oral o escrito. Él me dijo por escrito y firmado. Un hombre muy petulante, descomedido y azaroso, cansa su modo de ser y muy mandón. Me senté a la máquina y le di una recomendación tan especial que nunca había soñado darla. Le hablé de su buen trabajo honrado en comercio exterior y atención a los viajeros de los distintos despachadores comerciales nacionales y extranjeros arqueo de caja diario etcétera salió a muy pesar nuestro no le queríamos aceptar la renuncia y pagó un preaviso de 45 días le teníamos asignado un carro para sus desplazamientos le ofrecimos otras garantías pero fue imposible detenerlo. Se juega un buen cargo y si regresa lo recibimos con los brazos abiertos, porque es un excelente trabajador y muy honrado. Una vez la firmé, se la entregué a Memo Sarama y se puso a leerla de una manera incómoda. Terminó de leerla, se paró y rompió la constancia sobre mi escritorio, se puso frioso, ni me agradeció y salió sin decirle nada y nos esperaba una certificación como la que le vi.