Considera esta reflexión
Tomado del libro inédito: Entre cartas y poemas (Castro, Tania. In press)
00:00:00 - Noche de paz. Noche de reflexión ante una carta enviada a un amigo que considera esa amistad como el peldaño que podría llevarlos más allá de lo que ahora sienten. La carta de esta noche lleva por título considera esta reflexión tomado del libro inédito entre cartas y poemas escrito por Tania Castro Nuñez considera esta reflexión a ti que tienes la cualidad de descifrar mis pensamientos y hacer memorables los buenos momentos
00:00:52 - ¿Sabes? Ayer, después de la medianoche, de repente y sin motivo aparente, he despertado de un sueño profundo. Esta es la primera ocasión en la cual tu intrépido e intermitente pensamiento eligió alterar mi ciclo normal de sueño, hasta el instante en el que vi los primeros destellos de luz, hacer su entrada triunfal, anunciando un nuevo amanecer.
00:01:25 - Se me antoja pensar que este sentir ha sido el indicio de un legítimo despertar, después de haber estado absorta en la contemplación de mi propio mundo, sin advertir que habías estado ahí, en un mundo paralelo, esperando intersecarse y coincidir en algún punto. ¿Acaso omití la función que permitiera la intersección de esos mundos equidistantes? Ese despertar repentino me condujo a nuestro segundo encuentro vespertino en el día de Acción de Gracias, donde la evocación de recuerdos, vivencias personales y de academia se fueron incorporando a las exquisitas viandas, copas y botellas servidas en un ambiente que invitaba al deleite de la prosa, entre aromas, música y sabores, entre tantas cosas de sentir distante durante la despedida. No parecía ser el mismo hombre que me había visto partir con un pensamiento que quedó pausado durante 15 calendarios. Un nuevo encuentro suscitó un peculiar toque de picardía entre la mordaga cuando me pediste seis peces para considerar mi disponibilidad ante tu propuesta, cargada de sentimientos.
00:02:59 - Quizás acepte tu propuesta, sin más comentarios llegué a mi destino temporal y esta vez fui yo quien te vio partir entre el bullicio de las calles que promocionaban un nuevo año de firmes propósitos y nuevos retos.
encuentro en la ciudad heroica se convertiría en el pionero de veladas entre el deleite de pintas y tertulias celebradas al antojo de los días. El nuevo calendario fue nutriéndose de diálogos de academia, vivencias, observaciones, temores, relatos de amores fallidos y desamores, anécdotas y sugerencias que desfilaban con el pasar de las horas, al punto de expresarme la tarde de un domingo cualquiera, que el tiempo se te pasaba conmigo. Estoy de acuerdo con tu pensamiento, porque efectivamente el tiempo está bien invertido cuando se disfruta en compañía de amigos excepcionalmente maravillosos como el que está leyendo estas líneas.00:04:19 - Sin embargo, es esencial considerar que ese disfrute a veces se ve opacado por la tendencia de la era digital que constantemente está invitando al Ningufoneo, robándose ocasionalmente la atención en momentos de diálogo, arrastrando, sin intención, a la descortesía.
00:04:44 - Sin darnos cuenta, los primeros seis meses dieron sus frutos en el aspecto personal, por una parte.
00:04:52 - Fue significativo el giro que le diste a tu ser, ese hombre distante pronto iba recuperando su vigor, cuánto admiro tu resolución por convertirte en esa versión mejorada después de la tormenta. En cambio yo no iba a tu ritmo porque no hallaba el camino para liberarme de un pasado que me afligía y no me permitía ver lo maravillosa que seguía siendo la vida a pesar de sus bemoles, hasta el día que encontré la solución plasmando mis sentimientos en una carta sin destino, ahí se pulté las lágrimas que en varias ocasiones viste correr por mis mejillas. Esta reflexión me lleva a pensar que donde estamos actualmente es lo que nos ha permitido avanzar con paso firme hacia la sublime cima de la satisfacción personal que en otro momento parecía inalcanzable.
00:06:05 - Aunque da camino por recorrer, pero las cargas son más livianas ahora que sacamos el peso inútil de las maletas emocionales para volver a llenarlas con nuevas y mejores experiencias.
00:06:21 - Bien lo dijo Alejandro Cuellar, en este viaje de la vida, al final te das cuenta que lo único que te cabe en la maleta son tus emociones y experiencias.
tu ser y amo tanto que hayas respetado el mío. Por eso te admiro y valoro cada gesto amable que proviene de ti. Me deleita, ver tu gallardía con ese esbozo de sonrisa y picardía. El ser observador te permite estar atento a los detalles. Esto he aprendido de ti. valoró el juicio crítico-académico que despliegas porque contribuye al desarrollo de mis competencias.00:07:12 - Tu voz imponente es cautivadora cuando expresas tus pensamientos en un segundo idioma, aunque no me embelezó, me encanta escucharte. Te parecerá extraño y realmente lo es, pero me agrada que no siempre estés dispuesto a complacer mis peticiones, porque no sería estimulante decirle sí a todo. Quiero seguir disfrutándote al ritmo que necesitemos porque sentimos tranquilidad, comodidad, armonía y respeto. Las mocedades de antaño decidieron con infaciencia al rumbo de mi vida, pero el tiempo me enseñó a esperar el momento adecuado para proceder assertivamente y darle un mejor sentido a mi ser. Hoy siento que es el tiempo perfecto y no el de seis meses atrás, pues ninguno de los dos estaba listo para afrontar los roles inerentes al cambio de sentimientos. Perdemos tiempo, mientras deambulamos en busca de satisfacciones pasajeras o buscamos la perfección donde no la hay, realmente añoras esa sensación de hogar, eso es lo que percibo cuando estamos reunidos y haces comentarios acerca de la familia, hacia dónde vamos mi querido amigo, el futuro es el ahora que espera paciente el encuentro de dos almas libres, imperfectas e independientes, aliadas para conseguir un propósito loable.
00:09:00 - Necesité un año para darme cuenta que estabas ahí apuntando al mismo horizonte, así que decidí tomar mis convicciones e invertirlas en esta propuesta.
00:09:15 - Si sigue vigente, quiero que sepas que encontrarás un proyecto de vida a largo plazo con una aliada de risas, aventuras, placeres, alegrías y algunos insabores que recuerden lo imperfecto del ser humano.
00:09:34 - Tómate tu tiempo.
00:09:37 - Déjate guiar por Dios para tomar las mejores decisiones con sabiduría y discernimiento.
00:09:45 - Espera confiando en Él y no te apresures. Mantente alerta para reconocer dónde y con quién quieres estar y qué quieres construir para el futuro, porque en algún momento tendrás que permitirte a ti mismo escoger lo duradero por encima de lo perecedero y en ese momento estaré a tu lado.
Considera esta reflexión
A ti que tienes la cualidad de descifrar mis pensamientos y hacer memorables los buenos momentos”. CNT
Sabes… ayer después de la medianoche de repente y sin motivo aparente he despertado de un sueño profundo, esta es la primera ocasión en la cual tu intrépido e intermitente pensamiento eligió alterar mi ciclo normal de sueño hasta el instante en el que ví los primeros destellos de luz hacer su entrada triunfal anunciando un nuevo amanecer. Se me antoja pensar que este sentir ha sido el indicio de un legítimo despertar después de haber estado absorta en la contemplación de mi propio mundo sin advertir que habías estado ahí en un mundo paralelo esperando intersecarse y coincidir en algún punto. ¿Acaso omití la función que permitiera la intersección de esos mundos equidistantes?
Ese despertar repentino me condujo a nuestro segundo encuentro vespertino en el día de acción de gracias donde la evocación de recuerdos, vivencias personales y de academia se fueron incorporando a las exquisitas viandas, copas y botellas servidas en un ambiente que invitaba al deleite de la prosa entre aromas, música y sabores. Entre tantas cosas te sentí distante durante la despedida, no parecías ser el mismo hombre que me había visto partir con un pensamiento que quedó pausado durante 15 calendarios. Un nuevo encuentro suscitó un peculiar toque de picardía entre la mordaga cuando me pediste seis meses para considerar mi disponibilidad ante tu propuesta cargada de sentimientos. Quizás acepte tu propuesta… sin más comentarios llegué a mi destino temporal y esta vez fui yo quien te vio partir entre el bullicio de las calles que promocionaban un nuevo año lleno de firmes propósitos y nuevos retos. Ese encuentro en la ciudad heroica se convertiría en el pionero de veladas entre el deleite de pintas y tertulias celebradas al antojo de los días.
El nuevo calendario fue nutriéndose de diálogos de academia, vivencias, observaciones, temores, relatos de amores fallidos y desamores, anécdotas y sugerencias que desfilaban con el pasar de las horas, al punto de expresarme la tarde de un domingo cualquiera que el tiempo se te pasaba conmigo. Estoy de acuerdo con tu pensamiento porque efectivamente el tiempo está bien invertido cuando se disfruta en compañía de amigos excepcionalmente maravillosos como el que está leyendo estas líneas. Sin embargo, es esencial considerar que ese disfrute a veces se ve opacado por la tendencia de la era digital que constantemente está invitando al ningufoneo, robándose ocasionalmente la atención en momentos de diálogo, arrastrando sin intención a la descortesía.
Sin darnos cuenta los primeros seis meses dieron sus frutos en el aspecto personal. Por una parte, fue significativo el giro que le diste a tu ser; ese hombre distante pronto iba recuperando su vigor. Cuanto admiro tu resolución por convertirte en esa versión mejorada después de la tormenta, en cambio yo no iba a tu ritmo porque no hallaba el camino para liberarme de un pasado que me afligía y no me permitía ver lo maravillosa que seguía siendo la vida a pesar de sus bemoles; hasta el día que encontré la solución plasmando mis sentimientos en una carta sin destino. Ahí sepulté las lágrimas que en varias ocasiones viste correr por mis mejillas. Esta reflexión me lleva a pensar que donde estamos actualmente es lo que nos ha permitido avanzar con paso firme hacia la sublime cima de la satisfacción personal que en otro momento parecía inalcanzable. Aún queda camino por recorrer, pero las cargas son más livianas ahora que sacamos el peso inútil de las maletas emocionales para volver a llenarlas con nuevas y mejores experiencias. Bien lo dijo Alejandro Cuéllar: “En este viaje de la vida al final te das cuenta que lo único que te cabe en la maleta son tus emociones y experiencias”
Respeto tu ser y amo tanto que hayas respetado el mío, por eso te admiro y valoro cada gesto amable que proviene de ti, me deleita ver tu gallardía con ese esbozo de sonrisa y picardía, el ser observador te permite estar atento a los detalles, esto he aprendido de ti, también valoro el juicio crítico académico que despliegas porque contribuye al desarrollo de mis competencias, tu voz imponente es cautivadora cuando expresas tus pensamientos en un segundo idioma; aunque no me embeleso me encanta escucharte. Te parecerá extraño y realmente lo es, pero me agrada que no siempre estés dispuesto a complacer mis peticiones porque no sería estimulante decirle sí a todo. Quiero seguir disfrutándote al ritmo que necesitemos porque sentimos tranquilidad, comodidad, armonía y respeto.
Las mocedades de antaño decidieron con impaciencia el rumbo de mi vida, pero el tiempo me enseñó a esperar el momento adecuado para proceder asertivamente y darle un mejor sentido a mi ser. Hoy siento que es el tiempo perfecto y no el de seis meses atrás pues ninguno de los dos estaba listo para afrontar los roles inherentes al cambio de sentimientos. Perdemos tiempo mientras deambulamos en busca de satisfacciones pasajeras o buscamos la perfección donde no la hay. Realmente añoras esa sensación de hogar, eso es lo que percibo cuando estamos reunidos y haces comentarios acerca de la familia.
¿Hacia dónde vamos mi querido amigo? el futuro es el ahora que espera paciente el encuentro de dos almas libres, imperfectas e independientes aliadas para conseguir un propósito loable. Necesité un año para darme cuenta que estabas ahí apuntando al mismo horizonte, así que decidí tomar mis convicciones e invertirlas en esta propuesta. Si sigue vigente quiero que sepas que encontrarás un proyecto de vida a largo plazo con una aliada de risas, aventuras, placeres, alegrías y algunos sinsabores que recuerden lo imperfecto del ser humano. Tómate tu tiempo, déjate guiar por Dios para tomar las mejores decisiones con sabiduría y discernimiento, espera confiando en Él y no te apresures, mantente alerta para reconocer donde y con quién quieres estar y que quieres construir para el futuro, porque en algún momento tendrás que permitirte a ti mismo escoger lo duradero por encima de lo perecedero y en ese momento, estaré a tu lado.
