Episode 0: El zorro inteligente

00:00:00 - Cuento el zorro inteligente, adaptación del cuento popular de España, cuenta la historia que un león y una leona vivían juntos en una cueva, él era el rey de los animales y ella la reina, además de trabajar codo con codo poniendo paz y orden entre los animales

00:00:25 - Estaban casados y se llevaban muy bien, un día tras varios años de amor y convivencia el león cambió de opinión.

00:00:35 - Lo siento querido esposa, pero ya no quiero vivir contigo.

00:00:40 - La leona no se lo esperaba y se puso muy triste.

00:00:43 - Pero, ¿por qué?

00:00:46 - ¿Es que ya no me quieres?

00:00:49 - El león fue muy sincero con ella.

te quiero, pero te dejo por capestas, y ya no soporto más ese olor que desprendes y que atufa toda la cueva. La pobre se injusto muchísimo, y por supuesto se sintió muy ofendida. Capesto, eso es mentira, me lavo todos los días y cuido mi hiene para estar siempre limpia y tener el pelo brillante. Tú lo dices porque te has enamorado de otra leona y quieres irte a vivir con ella. La pelea estaba servida, la pareja comenzó a discutir acaloradamente y ninguno daba su brazo a torcer. Pasadas dos horas la leona cansada de reñir le dijo a su marido. Como no nos ponemos de acuerdo, te propongo que llamemos a tres animales y que ellos opinen si es verdad que vuelo mal o es una mentira de las tuyas. De acuerdo, te parece bien que avicemos al burro, al cerdo y al zorro, por mi no hay problema. Pocos minutos después, los tres animales elegidos al azar se presentaron en la cueva obedeciendo el mandato real. El león, con mucha pomposidad, les explicó el motivo de la improvisada asamblea, gracias por acudir con tal celeridad a nuestra llamada, os hemos reunido aquí porque meditamos vuestra opinión sincera, la reina y yo nos hemos ensarzado en una discusión muy desagradable y meditamos que vosotros decidáis quien decide la verdad. El burro, el cerdo y el zorro ni pestañaron.

00:02:52 - ¿Qué debían decir? Estaban intrigadisimos esperando a que el león se lo contara.

00:03:01 - Quiero que os acerqueis a mi esposa y digáis si huele bien o mal. Eso es todo. Los tres animales se se miraron atemorizado, pero como se trataba de una orden de los reyes, escurrir el bulto no era una opción.

00:03:20 - Alguien tenía que ser el primero y le tocó al burro. Bastanta asustado dio unos pasos hacia adelante y arrimó el hocico al cuello de la leona.

00:03:32 - ¡Puf! ¡Qué horror!

00:03:35 - ¡Señora, usted huele capesta!

00:03:38 - La leona se sintió insultada y perdió los nervios.

00:03:44 - ¿Cómo te atreves a hablar así a tu reina?

00:03:46 - Desde ahora mismo quedas expulsado de estos territorios.

00:03:50 - Lárgate y no vuelvas nunca más por aquí.

00:03:56 - El borribo pagó muy cara su contestación y se fue con el rabo entre las piernas en busca de un nuevo lugar para vivir.

00:04:05 - El cerdo, viendo lo que le acaba de pasar a su compañero, pensó que jugaba con ventaja, pero que aún así debía calibrar muy bien lo que debía responder.

00:04:17 - Ya próximo a la leona, la olisquió detenidamente y para que no lo ocurriera lo mismo que el burro dijo.

00:04:24 - Pues a mi me parece un placer acercarme a usted porque esprende un aroma divino.

00:04:35 - Esta vez fue el león el que entró en colera.

00:04:39 - ¿Qué estás diciendo? Que el que miente soy yo debería dar de vergüenza contra decir a tu rey.

00:04:45 - Lárgate de este reino para siempre fuera de mi vista.

00:04:49 - El cerdo, que pensaba que tenía todas las de ganar, fracasó estrepitosamente al igual que el burro, tuvo que exiliarse a tierras lejanas, solo quedaba el zorro, imagínate el dilema que tenía en ese momento el infortunado animal mientras esperaba su turno, si decía lo mismo que el burro, la reina se enfadaría, si decía lo contrario como el cerdo, la bronga se le echaría el rey. Qué horrible situación. Tenía que pensar en algo ingenioso cuanto antes o su destino sería el mismo que el de sus colegas.

00:05:31 - Quieto como si estuviera petrificado escuchó la voz del rey León.

00:05:36 - Zorro, te toca a ti, acércate a la reina y danos tu veredicto. Al zorrito le costó moverse porque le temblaba todo el cuerpo, traendo saliva se dirigió a donde estaba la leona y con mucho respeto la olfativa, después se separó y volvió a su sitio. El rey, en deseo de escucharlo,

00:06:02 - El rey ardía en deseo de escucharlo, y bien, nos tienes en ascuar,

00:06:13 - Dile lo que tengas que decir, el zorro, tratando de aparentar tranquilidad, fingido tener un poco de tos y dijo con voz quebrada.

00:06:22 - Majestad, siento no poder ayudarles, pero es que a mi no me duele, no me huele ni bien ni mal, porque estoy constipado.

00:06:34 - El León y la Leona se miraron sorprendidos y tuvieron que admitir que no podían castigar al zorro porque su contestación no ofendía ni dejaba por mentirosa ninguno de los dos.

el rey león tomó la palabra. Está bien, lo entendemos. Puedes marcharte a tu casa, a tu casa.

00:06:58 - Nadie sabe cómo acabó la historia, ni siquiera tenía la razón, ni si finalmente la pareja llegó a un acuerdo de separación. Lo que sí sabe todo el mundo es que el inteligente sorrito logró safarse del castigo de los reyes, gracias a su simpatía y ocurrencia.